¿Has sentido alguna vez la necesidad irrefrenable de hacer compras de manera compulsiva o sin ningún motivo? Si la respuesta es sí, entonces posiblemente puedas estar padeciendo un trastorno de compra compulsiva u Oniomanía.
El término Oniomanía hace referencia a: Onios (Algo que se vende) y manía, refiriéndose al estado donde el individuo experimenta un deseo incontrolable por comprar.
Como parte de la historia, en 1942 se le acuñó el término Oniomanía al trastorno compulsivo por hacer compras, por los psiquiatras Emil Kraepelin y Eugen Bleuler quienes describían a los individuos con este trastorno, con un “Desorden de compradores compulsivos”
En la actualidad, uno de los más grandes placeres de la sociedad moderna es el dejarse llevar por la necesidad de adquirir objetos de manera desproporcionada.
En muchas situaciones incluso la necesidad puede ir más allá de la propia posibilidad económica del individuo. Es por ello que la Oniomanía puede acarrear serios problemas de índole familiar, ya que la situación puede volverse insostenible.
Signos de Oniomanía
Las personas que padecen una adicción a las compras suelen estar en el inicio de la edad adulta, aproximadamente entre los 18 y 30 años. Estas personas suelen gastar elevadas cantidades de dinero en compras, en algunos casos llegando a acumular deudas.
Algunos de los signos asociados al trastorno se destacan los siguientes:
- Ansiedad generalizada por consumir y falta de autocontrol por realizar compras, siendo este su principal signo.
- Por lo general cuando el oniómano realiza sus compras. Este puede llegar a sentir placer de manera momentánea, sin embargo, esta sensación se transforma en una sensación de insatisfacción.
- La persona puede desarrollar sentimientos de culpabilidad y vergüenza una vez que ha gastado una suma importante de dinero o ha realizado una compra innecesaria.
- Autoestima baja y escasas relaciones interpersonales.
- Ansiedad, depresión o sensación de vacío cuando no compran.
- Por lo general, parte de los signos asociados a la Oniomanía también genera trastornos del sueño. Entre ellos, el insomnio, el cual se ve reflejado debido a las inquietudes que pueden generar los problemas o la situación económica del individuo.
- Como parte de otros signos asociados, se encuentra la irritabilidad, la ira y el enojo que puede llegar a padecer el individuo.
Estas sensaciones pueden darse por varios motivos, entre ellos, la falta de dinero o los problemas económicos que no permitan que la persona realice las compras y satisfaga su necesidad por comprar.
Pueden ocurrir por sentimientos de incomprensión, donde el individuo asuma una posición en la que sienta que no es comprendido.
En general, las mujeres que padecen este trastorno tienden a realizar compras compulsivas en relación a la ropa, zapatos, maquillaje, complementos, etc. Mientras que los hombres son más proclives a adquirir aparatos electrónicos, nuevas tecnologías, deporte, etc. También es muy común que se compren marcas caras, muchas veces con la excusa de que están baratas o son una ganga.
Causas de la Oniomanía
Seguramente, si has sentido la necesidad de comprar compulsivamente, solo puedes reconocer lo que sientes, y cómo te sientes cuando lo haces, sin embargo, ¿te has preguntado o conoces realmente qué causa esa necesidad por comprar?
Las causas de la Oniomanía pueden ser muy diversas, e incluso pueden llegar a ser bastante complejas:
Baja autoestima
Una de las principales causas de compras compulsivas se asocia muy estrechamente a la baja autoestima. Tanto hombres como mujeres con baja autoestima tienen mayores probabilidades de desarrollar trastornos de compras compulsivas.
Especialmente porque tienen más probabilidades de sucumbir ante la presión social y buscar adquirir artículos, productos o servicios que le hagan sentir en un estado o estatus social “aceptable” de acuerdo a su criterio personal y su círculo social.
Hoy día es aún más sencillo caer ante la presión social debido a que nos encontramos en una época en la que el consumismo cada día aumenta más y más.
Estrés
En segundo lugar, podemos destacar a las situaciones de estrés que puede llegar a tener un individuo. Estas situaciones estresantes pueden ser predisponentes para el desarrollo del trastorno de compra compulsiva.
La compra compulsiva en este caso suele hacer que el individuo consiga evadir sus problemas o liberar la situación de estrés de manera temporal cuando consigue sentir placer al realizar las compras.
Vacío o sentimiento de soledad
Las personas con dificultades sociales pueden desarrollar muy fácilmente Oniomanía, especialmente porque son personas que en algún punto del día o de la vida pueden llegar a sentir que algo les falta.
Este sentimiento de vacío y de soledad puede ser reemplazado fácilmente de manera momentánea cuando el individuo realiza una compra.
La situación se torna compleja y se vuelve un problema cuando el sentimiento de vacío personal regresa y la única forma de reemplazarlo o de sentirse mejor consigo mismo/a es a través de las compras compulsivas.
Educación carente de límites
La educación familiar es uno de los factores más importantes en cuanto al desarrollo o aparición de trastornos en la vida de una persona.
Si una persona ha crecido en una situación en la que siempre ha obtenido todo lo que quería o sus caprichos eran atendidos de forma inmediata, esto muy posiblemente daría pie a la aparición de trastornos como el de compra compulsiva.
Una educación carente de límites permite que el individuo interiorice ese modelo de crianza, donde el deseo no se pospone.
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Edad y sexo
En la actualidad se considera que la población más susceptible a padecer de Oniomanía son los adolescentes y los jóvenes, y más que todo, se encuentra orientado a las mujeres.
En la juventud y adolescencia se correlaciona por la predisposición de aceptar y validar los valores del consumismo. Como mencionamos anteriormente.
Además de ello, son la población con mayor predisposición a intentar conseguir la aprobación de su entorno o grupo social. Por lo que siempre intentarán aparentar situaciones o estatus a través del consumismo.
Como hemos mencionado anteriormente, la prevalencia en la población de la Oniomanía es relativamente alta, y los estudios confirman que las mujeres son más sensibles que los hombres a desarrollar este trastorno.
Consejos para lograr autocontrol
Busca ayuda profesional
Sí, una de las principales maneras de conseguir autocontrol y encontrar la solución al problema, es conocer qué lo está ocasionando y en base a ello, trabajar en la raíz del problema.
Acudir con un profesional de la salud mental contribuirá de manera positiva en la resolución del problema, mediante terapias que ayuden a reemplazar y disminuir la necesidad de realizar compras orientadas por un proceso personal.
La ayuda profesional es siempre una de las primeras opciones, sin embargo, muchas personas la dejan como última opción.
Planea tus compras con anterioridad
Si has notado que te cuesta contenerte y no puedes no dejar de querer comprar todo lo que se te antoja, para solucionarlo puedes reprogramarte y planificar muy bien tus compras.
Hacer una lista con las cosas que necesitas y que son primordiales te permitirá centrarte en solo llevar contigo lo que tienes en la lista y evitarte malas sensaciones a futuro.
Ve en compañía de alguien
Otra buena opción o forma de reducir los episodios de compras compulsivas es solicitarle a alguien cercano la posibilidad de acompañarte a realizar las compras.
Si previamente has realizado la lista con las cosas esenciales y vas en compañía de alguien, es muy difícil que caigas en la necesidad de adquirir un producto no esencial o comprar por placer.
Sin embargo, si sintieras la necesidad de comprar compulsivamente, tu compañía podría ayudarte muchísimo a evitarlo.
Si estás triste, no compres
Evita realizar compras cuando te sientas triste, deprimido o estés atravesando alguna situación que altere tu estado de ánimo.
Antes de salir a realizar compras, intenta llamar a alguien cercano y pídele conversar o salir a hacer alguna actividad al aire libre, Puede funcionar muy bien para disminuir la sensación de malestar y evitar comprar impulsivamente.
Por otra parte, esto no solo aplica para situaciones tristes, evita también salir a comprar cuando estés feliz o emocionado como un método de auto-felicitarte o como recompensa.
Establece un presupuesto
Con ayuda de la lista que hemos mencionado anteriormente puedes establecer un presupuesto que te permita solo adquirir lo necesario y no dejar espacio para comprar otras cosas.
Una vez establezcas un presupuesto, cíñete a él y trata en lo posible en no dar prioridad a otras cosas al momento de realizar las compras.
Reflexiona sobre la situación
Antes de establecer una lista y un presupuesto reflexiona primero sobre ello, sobre los productos o lo que es verdaderamente primordial.
Analiza la situación y reflexiona sobre cómo te sientes después de realizar una compra compulsiva. Eso te puede ayudar a poner límites y centrarte en lo verdaderamente importante.
Cuando establezcas una lista, piensa en si es lo necesitas o si se trata de un capricho.
Si vives con alguien, en familia, en pareja, puedes pedirle ayuda a alguien de núcleo familiar para establecer los ítems a considerar como verdaderamente necesarios.
