Cuando hay sedentarismo, repercute de manera negativa en la vida de la persona tanto física como psicológicamente, incrementando el riesgo de sufrir depresión, apatía, falta de impulsos, pérdidas de memoria y aumenta la pereza y la insatisfacción.
El estilo de vida es determinante a la hora de hablar de salud mental. Según un estudio realizado por la Universidad de Navarra, las mujeres casadas y fumadoras son las que realizan menor actividad física y, por lo tanto, presentan mayor riesgo de padecer enfermedades mentales.
Se ha estudiado que las personas que realizan mayor actividad física en su tiempo de ocio tienen menor probabilidad de sufrir enfermedades psiquiátricas como depresión, ansiedad o trastorno bipolar. Con la realización de algún tipo de actividad semanal, de alrededor de dos horas y media, se puede reducir hasta un 25% el riesgo de desarrollar estos trastornos. En cambio, el estudio mostraba que las personas con altos niveles de sedentarismo pasaban más de 42 horas semanales viendo la televisión o estaban delante del ordenador y se incrementaba la probabilidad de padecer estos problemas.
El riesgo de sufrir enfermedades mentales se reduce en un 25% cuando se mantiene una actividad física
Cuando hay sedentarismo, repercute de manera negativa en la vida de la persona tanto física como psicológicamente, incrementando el riesgo de sufrir depresión, apatía, falta de impulsos, pérdidas de memoria y aumenta la pereza y la insatisfacción. También pueden deteriorarse las habilidades sociales con tendencia al aislamiento del mundo exterior, de modo que se incrementa el pensamiento negativo y favorece la aparición de un bucle de baja tolerancia a los estímulos que puede favorecer los trastornos de ansiedad, las crisis de angustia, los trastornos depresivos y los trastornos somatomorfos que precisan un tratamiento psicológico y/o psiquiátrico intensivo.
Llevar un estilo de vida activo y la práctica regular de actividad física, puede contribuir a aliviar síntomas de enfermedades ya que el ejercicio físico es una terapia natural, donde se generan una serie de sustancias como las endorfinas, péptidos y neurotransmisores a nivel cerebral que ayudan a sentirse mejor con uno mismo. Al mismo tiempo se trabaja la fuerza de voluntad y la superación personal favoreciendo conductas saludables que incrementan el bienestar psicológico. Recuerda: Mens sana in corpore sano.
PROTEGEMOS LA SALUD MENTAL DE LOS TUYOS DESDE HACE 9 AÑOS
SESIONES PRESENCIALES Y TAMBIÉN ONLINE
Clara Díez. Psicóloga de IVANE SALUD
Unidad de Salud Mental. Hospital Valencia al Mar
Centro de Desintoxicación y Patología Dual Valencia. Hospital Aguas Vivas