Trastorno de la Conducta Alimentaria. IVANE SALUD Blog

Trastorno de conducta alimentaria. ¿Cómo detectar los primeros sintomas?

Índice de contenidos

¿Qué es TCA o trastorno de conducta alimentaria?

Los Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA) son trastornos psicológicos graves que conllevan alteraciones de la conducta alimentaria. La persona afectada con trastorno de conducta alimentaria, muestra una fuerte preocupación en relación al peso, la imagen corporal y la alimentación, entre otros.

Los trastornos alimentarios son afecciones médicas. No son un estilo de vida. Afectan la capacidad del cuerpo para obtener una nutrición adecuada. Esto puede provocar problemas de salud como enfermedades cardíacas y renales, o incluso la muerte (siendo las causas más frecuentes el suicidio o la desnutrición).

¿Cuáles son los tipos de trastornos alimentarios?

Dentro de los Trastornos de la Conducta alimentaria se incluyen:

Trastorno por atracón: Es decir, comer sin control. Las personas con trastorno por atracón siguen comiendo incluso después de estar llenas. A menudo, comen hasta que se sienten muy incómodos. En general, después tienen sentimientos de culpa, vergüenza y angustia.
Darse atracones de comida con demasiada frecuencia puede causar aumento de peso y obesidad. El trastorno por atracón es el trastorno alimentario más común en los Estados Unidos

Bulimia nerviosa: Las personas con bulimia nerviosa también tienen períodos de atracones. Pero luego se purgan provocándose vómitos o usando laxantes. También pueden hacer ejercicio en exceso o pueden ayunar (saltarse alguna comida).
Las personas con bulimia nerviosa pueden tener poco peso, peso normal o sobrepeso.

Anorexia nerviosa: Las personas con anorexia nerviosa restringen severamente los alimentos o comen cantidades muy pequeñas de solo algunos alimentos. Pueden verse a sí mismas con sobrepeso, incluso cuando están peligrosamente delgadas.
La anorexia nerviosa es el menos común de los tres trastornos alimenticios, pero a menudo es el más grave. Tiene la tasa de mortalidad más alta de cualquier trastorno mental.

¿Quién está en riesgo de tener un trastorno de la alimentación?

Los trastornos de la conducta alimentaria pueden afectar a personas de cualquier edad, origen racial y étnico, peso corporal y género. Incluso las personas que parecen ser saludables, como los atletas, pueden tener estos trastornos y estar extremadamente enfermas.

Las personas con trastornos de la conducta alimentaria pueden tener un bajo peso corporal, un peso normal o sobrepeso. En otras palabras, no se puede saber si alguien tiene un trastorno de la alimentación sólo por su físico.

Signos conductuales de una persona con trastorno de conducta alimentaria

Los trastornos de la conducta alimentaria pueden ser complejos y difíciles de identificar y de tratar en los niños y los adolescentes, pero cuanto antes se detecte un trastorno de la alimentación, mayor será la probabilidad para un paciente joven de obtener una mejoría y resolución del mismo.

La adolescencia es una etapa en el desarrollo de la persona y que comporta muchos cambios, ya sean a nivel físico, emocional, de responsabilidad, relacional, etc. El adolescente adquiere mayor autonomía, y ésta a veces puede entorpecer nuestra detección de signos de alarma por parte de las familias. Este problema de salud acostumbra a tener un inicio más o menos lento, en el que poco a poco se realizan cambios que al ser tan paulatinos la mayoría de las veces pasan inadvertidos en la dinámica habitual de la familia. Por lo que es muy importante detectar y evaluar situaciones que pueden comportar el inicio de un TCA; estas situaciones o signos de alarma pueden estar asociados a diferentes ítems relacionados con la patología alimentaria.

Un mejor pronóstico depende de la detección temprana del Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA), por lo que es importante prestar atención a posibles señales de alerta. Vigilar las conductas y actitudes que indican que la pérdida de peso y el control de la alimentación se están convirtiendo en la mayor preocupación de la persona.

PROTEGEMOS LA SALUD MENTAL DE LOS TUYOS DESDE HACE 9 AÑOS

SESIONES PRESENCIALES Y TAMBIÉN ONLINE

Signos conductuales de una persona con TAC (trastorno de conducta alimentaria):

  • Saltarse comidas con todo tipo de pretextos. No acabarse la comida o tirarla.
  • Esconder o almacenar comida.
  • Ir al lavabo inmediatamente después de las comidas. Intentar ocultar vómitos o justificarlos.
  • Quejas sobre estreñimiento y uso de laxantes, diuréticos y/o pastillas para adelgazar.
  • Mostrar un interés repentino en cocinar y recetas. Preparar platos elaborados, pero no probarlos.
  • Informarse sobre la composición de los alimentos y su valor energético (contar calorías).
  • Alterar los hábitos alimentarios, aumentando la ingesta de verduras y frutas y reduciendo o eliminando la ingesta de hidratos de carbono, proteínas y grasas.
  • Manías con la comida. Cortarla o partirla en trozos muy pequeños, removerla en el plato, masticar mucho, cambios en la velocidad de la ingesta, etc.
  • Disfrutar cuando otros comen o animarlos a hacerlo.
  • Masticar chicle continuamente o aumentar el consumo de bebidas dietéticas, café o té, normalmente con el objetivo de disimular el sentimiento de hambre.
  • Desaparición de grandes cantidades de comida, frecuentemente de alimentos prohibidos por ser hipercalóricos.
  • Aumento del ejercicio, que generalmente se realiza en solitario y de forma compulsiva. Aprovechar cualquier ocasión para ir caminando o evitar coger ascensores.
  • Tolerar mal los cambios en las rutinas diarias, vivirlos con estrés y ansiedad.
  • Ocultar el cuerpo con ropa ancha para disimular su forma o una posible pérdida de peso.
  • Inquietud continúa. No poder estarse quieta o sentada.
  • Alteración del rendimiento académico o laboral.
  • Miedo intenso a la ganancia de peso.
  • Insatisfacción importante con el propio cuerpo, la figura y el peso.
  • Distorsión de la imagen corporal (no percibir de forma realista el propio cuerpo).
  • Los únicos intereses son la comida, el ejercicio y el peso.
  • Baja autoestima y elevada autocrítica.
  • Bajo estado de ánimo o cambios frecuentes y bruscos, irritabilidad y/o ansiedad.
  • Una aparente ausencia de sentimientos. No expresar emociones como enfado, alegría, tristeza, placer o ansiedad.
  • No disfrutar con los hobbies y abandonarlos ni de otras actividades que antes resultaban placenteras.
  • Desinterés por la relación con los demás.
  • Distanciamiento de las amistades y aislamiento en el hogar.
  • Empeoramiento de las relaciones familiares y de la convivencia.

¿Cuál es la causa del trastorno de conducta alimentaria?

Son muchos los factores que intervienen en su aparición. Son trastornos de origen multifactorial (un factor por sí solo nunca es la causa).

Existen factores de tipo genético, psicológico, sociocultural, familiar y personal. De entre estos factores encontramos factores precipitantes y predisponentes. La interacción entre ambos suele generar una insatisfacción corporal que desemboca en un deseo de adelgazar.

¿Cómo se diagnostican los trastornos de la conducta alimentaria?

Su historia clínica, incluyendo preguntas sobre sus síntomas: Es importante ser honesto sobre sus comportamientos alimenticios y de actividad física para que su proveedor pueda ayudarle.

Un examen físico, análisis de sangre u orina para descartar otras posibles causas de sus síntomas.

Otras pruebas se pueden llevar a cabo para ver si tiene algún otro problema de salud causado por el trastorno alimentario. Estos pueden incluir pruebas de función renal y un electrocardiograma.

¿Cómo se tratan los trastornos de la alimentación?

Es posible tratar con éxito los trastornos de la alimentación. La detección y el tratamiento temprano son importantes para una recuperación total. Las personas con trastornos de la conducta alimentaria tienen un mayor riesgo de suicidio y de complicaciones médicas. Los miembros de la familia pueden desempeñar un papel fundamental en el tratamiento, ya que pueden alentar a la persona con problemas de alimentación o de imagen corporal a que busque ayuda. Los familiares también pueden brindar apoyo durante el tratamiento y pueden ser grandes aliados tanto para la persona como para el proveedor de atención médica.

Existen investigaciones que sugieren que la incorporación de la familia al tratamiento puede mejorar los resultados del mismo, especialmente para los adolescentes. Los planes de tratamiento para los trastornos de la alimentación incluyen psicoterapia, atención y controles médicos, asesoramiento nutricional, medicamentos o una combinación de estos enfoques.

Los objetivos habituales del tratamiento incluyen:

  • Restaurar una nutrición adecuada
  • Alcanzar un peso saludable
  • Reducir el exceso de ejercicio
  • Detener los comportamientos de atracones y purgas

Las personas con trastornos de la conducta alimentaria también pueden tener otros trastornos mentales (como depresión o ansiedad) o problemas con el consumo de sustancias. Es fundamental tratar cualquier afección concurrente como parte del plan de tratamiento.

Las formas específicas de psicoterapia (terapia de diálogo) y los enfoques cognitivo-conductuales pueden tratar eficazmente ciertos trastornos de la alimentación. Las investigaciones también sugieren que los medicamentos pueden ayudar a tratar algunos trastornos de la alimentación y la ansiedad o la depresión comórbidos relacionada con estos.

Compártelo en las redes

Deja un comentario

Buscar

Últimas entradas

Síndrome de Fatiga Crónica

Síndrome de Fatiga Crónica Severa: la mayoría de personas afectadas por este síndrome son mujeres

Qué es el Síndrome de Bálint y cómo afecta a la vida diaria de quiénes lo padecen.

Qué es el Síndrome de Bálint y cómo afecta a la vida diaria

El extraño Síndrome de Alicia en el País de las Maravillas: síntomas, causas y tratamiento

El Síndrome de Alicia en el País de las Maravillas existe: síntomas, causas y tratamiento

También te puede interesar...

Abrir chat
Hola
¿En qué podemos ayudarte?