La adicción, una realidad que afecta entre el 20-30% de personas que padecen este trastorno afectivo
El trastorno bipolar tiene una prevalencia en la población general de entre el 5 y el 7%, de los cuales los profesionales indican que la comorbilidad entre una adicción y el trastorno bipolar se sitúa entre el 20 y el 30% de los pacientes que acuden a consulta. Las sustancias más asociadas a este trastorno afectivo persistente son la nicotina, el alcohol y la cocaína.
Los pacientes con trastorno bipolar de género masculino y menores de 60 años, tienen mayor riesgo de sufrir una adicción a drogas y alcoholismo. Los estudios muestran que existe mayor prevalencia en hombres que en mujeres, por lo que el género puede suponer un factor de riesgo a la hora de tener una patología dual. En atención primaria es difícil hacer un diagnóstico exacto cuando se habla de comorbilidad, ya que, en diversas ocasiones, los casos leves, los estados afectivos mixtos o la ciclotimia, se diagnostican como una adicción a sustancias prescindiendo de una discriminación somera de la existencia de un trastorno afectivo subyacente.
Los pacientes con trastorno bipolar de género masculino y menores de 60 años, tienen mayor riesgo de sufrir una adicción a drogas y alcoholismo.
Consecuencias y síntomas
Además, las consecuencias por intoxicación de las drogas, pueden confundirse con los síntomas del trastorno en una fase de manía o hipomanía, lo que sumaría dificultad a un diagnóstico adecuado. Una vez pasados los efectos de la droga, se produce una sintomatología depresiva que puede llegar a durar hasta 4 semanas. El profesional debe esperar el tiempo necesario hasta que desaparezca ésta sintomatología para poder realizar una adecuado diagnóstico diferencial y evitar diagnósticos erróneos.
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Existen indicadores que pueden dar información sobre la presencia de dicha comorbilidad como son las recaídas, los intentos de suicidio, la impulsividad, la mala adherencia y el aumento de la resistencia en la respuesta a los abordajes terapéuticos planteados. Prestar atención a estos indicadores y tener en cuenta un criterio evolutivo y longitudinal en el tiempo ayuda a orientar el problema de salud global del paciente y realizar un tratamiento más efectivo enfocado a una mejor estabilización psicopatológica y una mejor prevención de recaídas en el consumo de alcohol, cocaína u otras sustancias.
Cuando el espectro bipolar y la adicción están presentes en el mismo paciente, el tratamiento integral y multidisciplinar es la norma, siendo indispensable un abordaje conjunto psicoterapeútico y psicofarmacológico.
Los medicamentos más frecuentes en el tratamiento de la patología dual que conlleva un trastorno bipolar y una drogodependencia son, preferentemente, los eutimizantes y los antipsicóticos atípicos. En algunas ocasiones en función de la sustancia ingerida se prefieren unos medicamentos u otros. Se considera que los fármacos antidepresivos como los inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS), los antidepresivos duales y los tricíclicos pueden utilizarse de forma autolimitada durante el episodio de mayor agudeza depresiva y bajo una supervisión estricta por parte del profesional sanitario y los familiares. Se ha estudiado sobre el uso del litio, valproato y carbamazepina como estabilizantes de ánimo de primera linea en casos de trastorno bipolar tipo 1 y tipo 2 que tienen problema de drogadicción aunque actualmente la necesidad de mantener una adecuada adherencia terapéutica y realizar una monitorización de los niveles en sangre, hacen que sea una alternativa que necesita un consenso con el paciente y la familia para adecuar el balance beneficio/riesgo en el paciente con patología dual. En este sentido, los anticonvulsivantes de nueva generación (oxcarbazepina, topiramato, gabapentina y lamotrigina) se presentan como una alternativa eficiente para el tratamiento de la sintomatología moderada de este tipo de este trastorno afectivo comórbido a la adicción a alcohol, cocaína u otras drogas.
1 comentario en «Trastorno bipolar y adicción a drogas»
Soy bipolar 2 y adicta, me ha costado años dejar la adicción al alcohol ya que cre que es por herencia, mis tres tíos murieron de cirrosis hepática y mi mamá también tuvo problemas de alcohol
De niña y adolescente sufría de una timidez y un trastorno antisocial que lo único que me permitió sociabilidad fué el alcohol que me desihibia, pero esto se fue alternando con depresiones, ansiedad crónica, hasta que me diagnosticaron bipolaridad tipo2.
No sé si todo esto se desencadenó por traumas en la niñez y la adolescencia, en el ámbito familiar, necesito ayuda, ya he recorrido un sin fin de psiquiatras y he tratado de suicidarme, porque ya me siento impotente y ya mi familia está cansada de mi, porque la ira toma posesión de mi