Adicción a los videojuegos
En el último año ha aumentado la demanda de tratamientos para la adicción a los videojuegos. Las cifras muestran que 9 de cada 100 usuarios sufre adicción a los videojuegos. El tiempo que se pasa delante de la pantalla aumenta durante los meses de verano, ya que los jugadores habituales suelen ser adolescentes en época de estudios y disponen de mayor tiempo libre para dedicarse a ello durante esos meses. Los videojuegos suponen un entretenimiento para los jóvenes, los cuales acaban haciendo un uso excesivo del juego y llevando consigo problemas que afectan a la salud, como la obesidad infantil derivada del sedentarismo. Estar delante de la pantalla pasa a ser la prioridad y, por ello, se realizan comidas de forma rápida y sin dialogar con la familia. Al pasar tanto tiempo jugando a los videojuegos, los adolescentes pasan más tiempo encerrados en casa y dejan de realizar actividades sociales, como actividad física, salir con los amigos o, simplemente, salir al aire libre.
Debido al fácil acceso a las nuevas tecnologías, los jóvenes se inician a una edad más temprana y cada vez existe un mayor número de personas con adicción a los videojuegos.
Una vez ya se ha establecido la adicción, el joven puede sufrir trastornos de la conducta derivado de ello, como por ejemplo, ansiedad, rabia y frustración; deterioro en las habilidades y aislamiento social; y consecuencias físicas, como alteraciones en el sueño o nerviosismo constante.
Perfil del jugador
Según la Asociación Catalana de Adicciones Sociales (ACENCAS) el perfil más común suele ser el de jugadores con personalidad inmadura que buscan recompensas inmediatas y emociones y riesgo. La mayoría son adolescentes de género masculino con edad comprendida entre los 12 y los 20 años. La preocupación y la obsesión por los juegos, el fracaso al intentar dejar el juego o la dependencia emocional (necesidad jugar), son algunos de los síntomas característicos de la adicción.
Según revelan algunos estudios los motivos más comunes por los cuales los adolescentes se sitúan delante de la pantalla son para evadirse de los problemas familiares o escolares o para mejorar su estado de ánimo.
¿Qué pueden hacer los padres?
El papel que tiene la familia a la hora de frenar esta conducta tiene una gran relevancia, ya que son los que conviven con el adolescente en el domicilio familiar. Algunas de las pautas a seguir por los padres y madres para realizar un uso correcto de los videojuegos son:
-Ayudar a elegir los juegos adecuados, con los que puedan divertirse, y hablar sobre los contenidos del juego.
PROTEGEMOS LA SALUD MENTAL DE LOS TUYOS DESDE HACE 9 AÑOS
SESIONES PRESENCIALES Y TAMBIÉN ONLINE
-Se desaconseja jugar en solitario o, incluso, instalar la videoconsola en un espacio comunitario.
-Observar si hay un hay un juego obsesivo y marcar limites, estableciendo horas o días para jugar.
-Compaginar los videojuegos con la realización de actividades físicas y sociales.
Clara Díez. Psicóloga de IVANE SALUD
Dra. Elisa Ibáñez. Psiquiatra de IVANE SALUD
Unidad de Salud Mental y Psiquiatría Hospitalaria en Hospital Vithas Valencia al Mar.
Centro de desintoxicación Valencia. Clínica de Desintoxicación y Patología Dual en Hospital Vithas Aguas Vivas.